Si bien, Universidad de Chile no ha podido repatriar a algunos futbolistas que fueron campeones con la U de la recordada Copa Sudamericana el año 2011, existe un gran sueño que no solamente tienen los hinchas, si no que támbien la dirigencia universitaria laica.
Y es que la U quiere la vuelta de Charles Aránguiz y la eventual venta de Darío Osorio pareciera ser la ocasión propicia para al menos hacer caja con tal decumplir con eso, pensando además, que la U sí o sí debe reforzar su plantilla con jugadores chilenos por no contar con cupo de extranjeros si es que desean nuevas incorporaciones.
El jugador eso uno de los grandes anhelos del cluby Azul Azul al menos realizó el sondeo por el Príncipe, considerando su actual momento en el Bayer Leverkusen que, sumado a una larga lesión y que lo podría tener de regreso próntamente a las canchas,no es el de tiempos pasados y que todo pasa también, por las pretensiones deportivas que tiene el puentealtino.
Aránguiz, de 33 años, tiene la idea de mantenerse en Europa y si por alguna razón en el cuadro de las aspirinas no hay opciones de jugar, ahí recién pensaría en volver a Sudamerica, pero en específico hacer una escala en Brasil antes del retorno definitivo a Chile, por lo que echó por tierra cualquier idea de repatriarlo. Al menos por ahora, Aránguiz no vuelve a la U.
¿Y Eduardo Vargas?
Turboman es otro que al menos, lo quisieran ver de regreso al Centro Deportivo Azul. Por lo realizado el año pasado, donde no tuvo gran participación y algunos problemas con la fanaticada del Atlético Mineiro tras su expulsión en Copa Libertadores, parecían demostrar que Eduardo Vargas, al menos, se iba de Brasil.
Sin embargo, el Mesías de Renca tuvo un repunte a finales de la temporada pasada sobre todo anotando goles importantes para los de Belo Horizonte y este domingo, jugó todo el segundo tiempo en el triunfo de su club ante en Tombense por el Campeonato Mineiro.
El máximo goleador azul en torneos internacionales, se afirmó en el fútbol brasileñoy tampoco por el momento se vislumbra una posibilidad de regreso. Ambos casos son imposibles que se produzcan en el corto plazo.
Asi es que los seguidores del bulla tendrán que seguir esperando con el deseo firme de ver vestidos de azul nuevamente a estos dos futbolistas que parecieran ser, la última esperanza de ver a aquellos que ganaron la Copa Sudamericana el 2011 nuevamente defendiendo a la institución.