Jorge “Kike” Acuña tuvo una carrera de dulce y agraz. Elex futbolista de 44 añostuvo un exitoso paso por Universidad Católica, lo que le valió a dar el salto al Feyenoord de Países Bajos y ser nominado constantemente a la Selección Chilena.
Si bien el ex entrenador de Unión San Felipe reconoció en varias oportunidades problemas con el alcohol producto de la excesiva fama que poseía lo que lo llevóa estancar su promisoria carrera, pero de un momento a otro el ex mediocampista dejó eso de lado y se enfocó en su futuro profesional.
En el programaMás Vivi que Nunca de TV+ conducido porVivi Kreutzberger, “Kike” Acuña abrió su corazón y confesólo mal que lo pasó en un momento de su vida y el daño que le hizo a sus más cercanos.
“Le hice mucho daño a la gente que me rodeaba, sobre todo a mi familia,me encerré en una burbuja donde me creía inmortal y se alejaron”, comenzó diciendo el ex seleccionado nacional.
Agregando que “mi mamá me mandaba mensajes y me escribía ‘hijo, ¿estás vivo?’, ese era el temor de ella, que la llamaran en la mañana para decirle que estaba muerto, y estuve cerca, porque desperté encima del tronco de un árbol mientras unos carabineros me golpeaban la ventana del auto y yo estaba metido ahí, nunca me di cuenta”
En esa misma línea, dio a conocerlas razones que lo llevaron a dejar el alcohol y estar cinco añossin beber una pizca de licor.”Estaba con mi mamá tomando, y yo me estaba muriendo, no me salía nada, me sentía débil, con ganas de vomitar, me dolía la cabeza, caminaba y tiritaba.Entonces le dijo ‘sabes, voy a ir a la botillería de la esquina para comprar dos packs de cervezas, uno para mí y otro para ti, y desde mañana no tomo más’, y se puso a reír”, reveló.
“Yo le pregunté por qué se reía y me dijo ‘pero si me lo has dicho tantas veces’, y le respondí ‘pero mamita, si nunca te lo había dicho, tú me preguntabas si iba a dejar de tomar, pero hoy te lo digo, no tomo más”, cerró la extensa entrevista.