Cuando se esperaba que la nueva edición del clásico entre Universidad de Chile y Universidad Católica se disputara de la mejor forma en el Estadio Ester Roa de Concepción, lamentables hechos fueron los que empañaron esta fiesta y tras el lanzamiento de bombas de ruidos por parte de algunos mal denominados hinchas, el partido termino siendo suspendido.
Tras estos actos, el mandamás del conjunto ‘Laico’, Michael Clark habló en la conferencia de presidentes y capitanes que se gestó de forma sorpresiva y se refirió a esta situación, en la que fue lapidario y declaró que tras estos hechos de violencia ya se debe tomar cartas serias sobre el asunto ante los personajes que lideran estas acciones.
“La verdad es que estamos con la sensación de mucha pena, de mucha rabia. El estadio estaba muy bonito, estaba precioso. Había 23, 22 mil personas. El espectáculo estaba muy bonito, tanto nosotros como Universidad Católica hicieron un tremendo esfuerzo porque esto estuviera bien y la verdad es que, por la acción de unos pocos delincuentes, cobardes, encapuchados, que se tapan la cara para hacer daño, en teoría, al club que ellos quieren, y se ponen a tirar bengalas, bengalas que caen no solamente a los mismos jugadores nuestros, al cuerpo técnico a alguien que estaba trabajando en una cámara a un carabinero, al mismo cuarto árbitro”, partió señalando Clark.
Siguiendo en esa línea, el mandamás de Azul Azul reveló que los sucesos de esta jornada son muy graves, los cuales terminan dañando de gran manera al equipo y todo el fútbol chileno y espera que después de los hechos de hoy, se tomen serias cartas en el asunto a nivel nacional.
“La verdad es que es impresentable, yo lo he dicho, ellos finalmente son hinchas de ellos mismos, no quieren el club y le hacen un daño tremendo al espectáculo, al fútbol chileno, a nosotros mismos, a lo que estaban haciendo Lucho (Casanova) y todo el equipo, al equipo que también estaba. La verdad es que esto que pasó hoy día es gravísimo, es gravísimo. Es de la mayor gravedad, nosotros creemos firmemente que esto tiene que marcar un antes y un después. Ya tuvimos un hecho similar el año pasado en la quinta región”.
“Yo creo que hoy día es mucho más grave lo que pasó hoy día y lo que pasó esa vez. Desde el minuto uno empezaron a tirarle bengalas a Cristóbal (Campos) y después todos vieron lo que sucedió en el minuto 30 claramente esto no es casualidad, yo creo que esto está organizado, concertado, te digo urgente nuevamente delincuentes que no son hinchas del fútbol, que no son hinchas de la U, cobardes, lo hacen a rostro descubierto, en una zona que era totalmente familiar, que estaba lleno de niños. Yo vi como subió una persona mayor, que estaba a punto de tener un infarto. La verdad es que esto no puede seguir pasando.”, explicó.
Finalmente, Clark hace alusión que después de lo de hoy las autoridades generalizadas de nuestro país y todos los entes pertinentes ligados al fútbol deben dar un golpe de mando para acabar finalmente con lo que es la violencia.
“No puede seguir pasando. Y yo creo que, si queremos sacar algo positivo de esto, yo creo que esto tiene que marcar un antes y un después. A partir de esto, algo tiene que cambiar. No podemos seguir igual, no podemos seguir haciendo siempre lo mismo condenando la violencia, que no haya medida y que todo siga igual, yo aquí creo que estamos en una señal de que estamos preocupados por el fútbol chileno”, cerró.