Los hinchas de Once Caldas ahora son los protagonistas del fútbol colombiano, parece que esuna situación que se salió de control y que tiene a los fanáticos en Manizalesen la mira del FPC, tras los actos que se vivieron en el Atanasio Girardot de Medellín en días pasados.
A esto se agrega, por ejemplo, lo que sucedió con Alejandro Montenegro en Ibagué en meses pasados, cuando invadió la gramilla del Murillo Toro y agredió por la espalda a Daniel Cataño, jugador de Millonarios. En esta ocasión, la hinchada se metió en el Palogrande y se tuvo que suspender el juego.
Vale resaltar que Once Caldas enfrentaba de local a Alianza Petrolera y cuando el juego iba 2-1 a favor del club petrolero, las barras no aguantaron más y reprocharon la derrota con una invasión que vuelve a colocar al fútbol colombiano en la mira.