El fútbol es un deporte colectivo en donde, como todo, la simpleza suma, en donde, muchas veces, menos es más. Cada decisión es clave y unos segundos de demora pueden cambiar todo.

Hay jugadores, por ejemplo, que pueden tener las mejores condiciones técnicas y físicas, pero si no saben decidir se convierten en futbolistas mediocres o directamente malos.

Joazhiño Arroé, por decir alguno, tiene un evidente defecto que necesita corregir. Y es que el jugador de Alianza Lima no sabe jugar simple y para el equipo. Muchas veces hace una, dos o tres demás y eso desespera a los hinchas.

En el último partido de Aliaza, un par de jugadas se frenaron por su responsabilidad. Los aficionados lo hicieron tendencia de tantas veces que le llamaron la atención en las redes sociales.

Algunos, de hecho, prefirieron tomárselo con humor. En twitter, por ejemplo, encontramos una genial imágen en la que se le compara con Quico del Chavo del 8. Este personaje no dejaba jugar a nadie con su pelota.

Asi, Arroé es víctima de troleos por sus defectos en la cancha. Deberá corregir y callar a los aficionados. Ya lo hizo una vez, puede hacerlo de nuevo.