Jessica Fox es una palista australiana, que se colgó la medalla de bronce de los Juegos Olímpicos Tokio 2020, luego de hacer mejor tiempo en el piragüismo slalom. Sin embargo, para llegar a la ronda final tuvo que arreglar la punta de su kayak, con nada más y nada menos, que con un condón.

Y es que antes de la prueba final en la que debía registrar un buen tiempo haciendo slalom con su kayak, en las aguas turbias del Kasai Canoe Slalom Centre, la deportista tuvo un incidente con su vehículo; una de las puntas estaba rota, lo que dificultaba el buen tránsito de la piragua.

Para solucionar el fallo resultó, junto con un hombre del cuerpo técnico, poniendole a esa punta un preservativo. En redes sociales, Fox escribió en broma: “apuesto a que no sabían que los condones pueden usarse para reparaciones de kayak".

Ya en la prueba, la oceánica quedó tercera, detrás de Ricarda Funk, quien se quedó con el oro y de Maialen Chourraut, que se colgó la plata. Y ojo ella obtuvo el bronce pese a su improvisado arreglo y, que si no hubiera sido por los cuatro segundos de penalización, hasta se hubiera llevado la presea dorada.

Luego de la competición, la atleta manifestó: "estaba soñando con eso y realmente creía que estaba dentro de mí, podía hacerlo, pero nunca se sabe lo que va a pasar en los Juegos Olímpicos. Se trata de mantener los nervios y probablemente no lo hice muy bien en el kayak un par de días antes, así que fue difícil llegar a este punto, pero ha sido increíble hacer lo que hice hoy".

Los resultados del piragüismo femenino en Juegos Olímpicos (posición, nombre, nacionalidad y tiempo):

  1. Ricarda Funk – Alemania – 1’05’’.50.
  2. Maialen Chourraut – España – 1’06’’.63.
  3. Jessica Fox – Australia - 1’06’’.7