Enojado por una decisión del juez, Igor Nosaryev, futbolista suplente en un encuentro aficionado del país europeo, decidió hacer justicia por mano propia. En Ucrania se desarrollaba, de forma normal y tranquila, un partido aficionado entre dos equipos no muy conocidos. Sin embargo, el encuentro se fue picando con el correr de los minutos, y el resultado no terminó siendo nada bueno. El árbitro del cotejo tomó una decisión que no conformó para nada a uno de los equipos, y, por ello, Igor Nosaryev, futbolista que se encontraba en el banco de suplentes, decidió ingresar al campo para aplicarle un puñetazo fenomenal al colegiado. Como consecuencia, el juez intentó expulsar al agresor, pero, luego, pareció haberse arrepentido de la decisión por temor a recibir una paliza. Igualmente, Nosaryev se retiró del campo como si nada hubiese sucedido. El video:
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