Martes de mucho fútbol en el marco de una nueva edición de la siempre apasionante UEFA Champions League, certamen que tiene como reciente campeón a Bayern Munich.

Es que, en la capital francesa, se encontraron frente a frente dos gigantes del viejo continente como Paris Saint-Germain, último subcampeón, y Manchester United.

En la previa, todos los pronósticos imaginaban un partido muy atractivo, con ambos equipos buscando la portería contraria e intentando quedarse con los tres puntos.

Y esa tendencia se hizo presente desde el primer momento, con los nombres propios de gran jerarquía intentando desnivelar para arrancar de la mejor manera.

Así fue como Neymar fue protagonista. Primero por un muy buen caño pero también sufriendo un lujo realmente extraordinario del portugués Bruno Fernandes.

Recostado sobre una de las bandas, el fino mediocampista recibió la presión del astro brasileño y lo dejó totalmente en ridículo con una maniobra que llamó la atención de todos.