La vida de Saúl “Canelo” Álvarez abajo del ring está llena de glamour y amistades con celebridades, algo que disfruta demasiado el boxeador mexicano. En esta ocasión el púgil originario de Guadalajara, Jalisco disfrutó de la visita de su gran amigo, el cantante “Residente”, quien decidió ir al gimnasio donde entrena el peleador mexicano, y donde se topó con una inesperada experiencia con el compatriota de Álvarez, Óscar Valdez.

En esta ocasión el famoso cantante de “This is not America” dio a conocer por medio de redes sociales su arribo con el famoso “Canelo Team” en donde no sólo fue muy bien recibido, sino también lo invitaron a formar parte de uno de los equipos de boxeo más asediados del mundo. Y es que el compositor René Pérez Joglar, nombre real del artista, de inmediato se puso manos a la obra.

A través de su cuenta de Instagram, el rapero puertorriqueño decidió compartir en diversas insta stories cómo fue su experiencia arriba del ring, donde tuvo la oportunidad no sólo de convivir con Canelo Álvarez sino también con Valdez, quien decidió tomarlo como su aprendiz, por lo que se dio a la tarea de enseñarle algunos de los principios básicos del pugilismo, empezando por el salto de cuerda.

En un video compartido por Top Rank, se le ve al puertorriqueño intentando hacer una rutina más que sencilla impuesta por Óscar, pero el afamado escritor no pudo igualar lo hecho por el boxeador, quien fue Campeón de las 130 libras, y que yacontinúa con su preparación de cara al combate que se espera protagonice contra Shakur Stevenson el próximo 30 de abril, donde espera llegar en la mejor forma.

Canelo y Residente / Instagram

A pesar de ser poco acertado en los ejercicios, Residente no dejó pasar la oportunidad para fotografiarse con ambos boxeadores, a quienes admira mucho, y con los cuáles sin duda pasó una gran tarde. Cabe recordar que la celebridad musical es amigo de Álvarez desde hace tiempo, y apenas hace unas semanas protagonizaron un triángulo de discordia entre él y J Balvin, por lo que el mexicano intentó suavizar la situación, pero sin éxito.