El combate estelar de la cartelera montada por Premier Boxing Champions y ShowTime este sábado en el AT&T Stadium de Arlington pagó con lo que los fanáticos esperaban ver. Dos campeones mundiales como Errol Spence y Yordenis Ugas salieron a brindarse al todo por el todo en un combate de unificación de títulos mundiales. Y el público lo agradeció.
Pese a la valentía y los contragolpes del cubano, poco a poco Errol Spence fue haciéndose amo y señor del cuadrilátero, llevándose por delante a su oponente con un altísimo volumen de golpes en la corta distancia, también con altísimo grado de efectividad. Entre el sexto y el séptimo asalto, en el ojo derecho de Ugas comenzaban a verse ya los signos del castigo.
Ya en el octavo asalto, el árbitro de la pelea interrumpió por primera vez las acciones para que el médico pudiera examinar el ojo del cubano, quien mientras era observado pedía que lo dejaran seguir peleando. Y así fue, aunque no por mucho tiempo más, pues la hinchazón ya era demasiado grande.
Spence entendió que era el momento de liquidar las acciones y avasalló al Ugas con ganchos al cuerpo y uppercuts al rostro. En el décimo, el estadounidense puso en graves problemas al cubano con una combinación y un minuto después el médico de la pelea volvería a interceder, esta vez para darla por finalizada entendiendo que Ugas no podía seguir con su ojo tan gravemente comprometido.
Yordenis Ugas reconoció la superioridad de Spence
Con su ojo derecho completamente cerrado por la inflamación, Yordenis Ugas tomó la palabra apenas finalizado el combate y reconoció la superioridad de Spence. “Estoy algo decepcionado por no poder haberle dado una victoria a la gente de Cuba. Perdí contra un grandísimo campeón. Errol Spence fue el mejor hombre esta noche. Quería seguir peleando, pero el médico paró la pelea. Mis felicitaciones para Spence”, dijo al micrófono de ShowTime.