Después de tanta especulación, el arribo de Roberto “Piojo” Alvarado a las Chivas de Guadalajara, le da una brisa de aire fresco al Rebaño Sagrado, pues al parecer las constantes indisciplinas y desplantes ya habían viciado el vestidor rojiblanco, así lo ha denotado los recientes comentarios de Ricardo Peláez y Amaury Vergara.
Ante esto, el propio Alvarado reconoció para Marca, que para él no será nada sencillo portar los colores del chiverío pues considera que es un gran compromiso: “Quiero dejar huella en Chivas, que cuando me vaya se acuerden de mí. Mi compromiso está desde el primer día en que llegué. Fuera del campo sabemos que debemos ser bastante cuidadosos, estamos en el ojo del huracán por decirlo así. Ser muy cuidadosos. Me siento tranquilo en ese aspecto, siempre trato de estar enfocado en el fútbol, dar mi cien por ciento, siempre habrá un momento para descansar y hacer lo que uno quiera”.
Este comentario coincide con las polémicas en las que ha estado rodeado Chivas por las actitudes de algunos de sus jugadores como Antuna, quien ha sido señalado en múltiples ocasiones por prestarmás atención a sus cuentas personales, las cuáles usa para quejarse,así como asistir a fiestas en plena temporada,que a su desempeño en el campo, el cual ha puesto en duda su calidad, pues ningún equipo se estaba peleando por ficharlo.
Pese a ello, Alvarado reconoció que no todo en su vida es estricto, ya que su familia es importante para él: “Mi esposa siempre me acompaña a todos lados, es mi motor. También mis papás que están con nosotros en todos lados y para mí ellos son bastante importantes, son algo por lo que disfruto jugar al fútbol y quiero dar el máximo”.