En lo que refiere al desarrollo de un nuevo fin de semana de competición, la Fórmula 1 afrontará el Gran Premio de Mónaco 2023 dentro de los días 26, 27 y 28 de mayo desde el circuito de Montecarlo. Mucha historia y detalles de color hay para tener en cuenta en la pista que, detrás de Gran Bretaña e Italia, son los que más ediciones desarrollaron a lo largo de los más de 70 años que ostenta la categoría.
La siempre compleja pista callejera que presenta el principado dice presente por 69° ocasión en una cita donde las habilidades del piloto juegan un gran papel. No muchos corredores son afortunados de poder decir que pudieron obtener un triunfo en Mónaco, lugar que todavía un latinoamericano triunfó en más ocasiones que el resto como Ayrton Senna, brasileño que logró seis victorias.
Sin embargo, un hecho que se hizo costumbre en el reciente tiempo fue la celebración que algunos pilotos realizaron al ganar el GP de Mónaco, principalmente porque uno de los gestos de celebración es arrojarse hacia una piscina que posee exclusivamente la pista, ubicada una de las zonas más lujosas de la misma. Esto es una tradición del último tiempo y que posee su correspondiente explicación.
¿Por qué algunos ganadores del GP de Mónaco se arrojaban a la piscina?
El GP de Mónaco tuvo a pilotos ganadores arrojados en la piscina únicamente cuando un corredor de Red Bull lo lograba. Pero el origen de ello no tiene nada que ver con un triunfo, ya que en el 2006 David Coulthard culminó en la tercera posición y el entonces director del equipo, Christian Horner, prometió aventarse a la piscina al desnudo. Con motivo de promocionar la película “Superman Regresa”, en un acuerdo con la escudería, quien sigue en el cargo se tapó su cuerpo al descubierto para realizar el salto.
A partir de ese entonces, la zona de la piscina pasó a ser una tradición “exlcusiva de Red Bull” sabiendo que hubieron pilotos que pudieron ganar en 2010, 2011, 2012, 2018, 2021 y 2022, este último con Sergio Pérez ejerciendo ello para después aventarse en el agua. También lo supo realizar Daniel Ricciardo en 2018 al cortar seis años sin triunfos allí, al igual que Sebastian Vettel entre 2010 y 2012.
Aunque hubo un “infiltrado” en asumir ese tipo de celebración, ya que Lewis Hamilton se impuso en 2019 a bordo del Mercedes y realizó el festejo ya nombrado. Sin embargo, debió salir rápidamente a ducharse debido a que “usan esa agua para apagar incendios y agregar químicos para una mayor eficiencia”, según manifestó la periodista de Movistar, Noemí de Miguel.
