Este sábado, en la T-Mobile Arena de Las Vegas, Dustin Poirier y Conor McGregor darán lugar a su trilogía de combates tras haberse repartido una victoria por lado en sus enfrentamientos anteriores. Pero es el estadounidense el que llega ganador, pues se quedó con el más reciente triunfo el último 23 de enero, con un contundente nocaut en el segundo asalto.
La escena subió mucho la temperatura ya desde la ceremonia de pesajes y última rueda de medios antes de la pelea, siendo el irlandés quien se mostró más provocador: “Este hombre va a aprender, que si le faltas el respeto a la amabilidad de alguien,y la tomas como debilidad, tendrás que pagar. Y mañana lo voy a hacer pagar con su vida”, expresó.
También cuando tuvieron que pararse cara a cara el aire se volvió muy espeso y hasta por momentos pareció que la repartija de golpes se adelantaría un día, al punto que tuvo que intervenir Dana White, CEO de UFC, para mantener la distancia entre ambos peleadores y poner orden.
Ya en el día de la pelea, horas antes del inicio de la transmisión oficial de ESPN, Dustin Poirier tuvo una última aparición en las redes sociales, no para provocar sino para dejar un mensaje de agradecimiento a sus fanáticos. “Gracias a todos por el amor y el apoyo constante”, escribió desde su cuenta de Twitter.
Lo que queda es prepararse para ver una pelea de máxima intensidad, para la que se pronostica una definición rápida, tal y como ha sucedido en los dos enfrentamientos anteriores. La primera vez fue McGregor quien anotó un nocaut en el primer asalto; mientras que en la revancha Poirier lo liquidó en el segundo.