Sevilla y Barcelona se enfrentaron en el Ramón Sánchez-Pizjuán para completar la fecha 4 con el partido que les quedó pendiente. Los de Xavi Hernández buscaban sumar un necesario triunfo ante los escoltas del torneo, que querían los tres puntos para acercarse a Real Madrid.
El Papu Gómez había abierto la cuenta a los 32 minutos con una buena definición cruzada por lo bajo que superó al esfuerzo de Marc-André Ter Stegen. El Barça se despertó a tiempo y consiguió igualar el trámite en los últimos minutos de la primera mitad.
Un buen centro de Ousmane Dembélé desde un córner encontró la cabeza de Ronald Araújo, que se elevó de gran manera y la clavó sobre el palo derecho de Bono. El elenco culé salía con confianza a disputar el complemento y allí obtendría más nuevas noticias.
Sobre los 18 minutos, una acción sobre un lateral terminó con Jules Koundé estallando de bronca y arrojándole la pelota en la cara a Jordi Alba. Carlos del Cerro Grande no dudó y le mostró la tarjeta roja al francés, que dejó a su equipo con uno menos con media hora por jugar.
