No hubo ni habrá mejor noticia en esta temporada baja para cualquier franquicia de la National Football League (NFL) como la vuelta del mariscal de campo Tom Brady a los Tampa Bay Buccaneers. Su regreso del retiro implica volver a competir por un Super Bowl.
El equipo iba camino a reconstruirse, pero cuando Brady anunció que volvería al menos una temporada más, la forma de encarar la agencia libre cambió rotundamente. Firmaron piezas importantes que de otro modo hubiesen dejado ir, y además volvieron a brindarle nuevas armas al GOAT.
El cuerpo de receptores tan dominante de la franquicia de Florida se vio diezmado en los últimos meses. Rob Gronkowski todavía no tiene definido qué hará, y Antonio Brown fue cortado al final del año tras su escandaloso retiro del campo en el medio de un partido.
Por eso, el general manager Jason Licht debió moverse y encontrar un receptor para acompañar al gran duo de Mike Evans y Chris Godwin. Así, encontró un jugador que Atlanta Falcons descartó, y que podría convertirse en el WR3 del mariscal de 44 años.
Nueva arma para Tom Brady
Los Buccaneers y el receptor ex Falcons, Russell Gage, acordaron un contrato de tres años y $30 millones de dólares con 20M garantizados, de acuerdo a Jeremy Fowler de ESPN. Gage, de 26 años, fue un pick de sexta ronda del Draft de 2018 y cada año, su rol en Atlanta ha crecido.
