La dura derrota de los New England Patriots ante Buffalo Bills por 21-24, con un grueso error de Cam Newton en la última jugada del partido, los deja con su peor racha en la historia de la NFL, con cuatro partidos consecutivos con derrota, dejando en la cuerda floja a Bill Belichick como su entrenador en jefe.

Y es que producto de esta nueva caída, quedando con récord negativo esta temporada 2020 de dos triunfos y cinco derrotas, ha quedado demostrado lo que muchos fanáticos y expertos temían: este equipo y este estratega no son nada sin la presencia del mariscal de campo Tom Brady.

¿Lo pones en duda? Los números no mienten. Cuando TB12 fue titular en las dos décadas que jugó en los Patriots, lograron 249 partidos ganados y 75 perdidos, con un porcentaje de rendimiento del 76.9 por ciento; ahora, cuando no jugó Brady, la escuadra de Belichick ganó 57 veces y sufrió 69 derrotas, es decir, un 45.6% de rendimiento.

Belichick, un perdedor sin Brady
 

Lo concreto es que si bien en la actualidad tiene en su plantilla a Cam Newton, Jarrett Sitdham y Brian Hoyer como mariscales de campo, ninguno ha podido ni siquiera acercarse a los números de las primeras temporadas de Brady en Foxborough.

 

Sin embargo, a la hora de explicar el mal presente, Belichick argumentó que esto se debía a que "estamos jugando con más jugadores jóvenes de los que hemos jugado en el pasado por una combinación de razones. Estuvimos muy comprometidos con nuestro equipo en los últimos años. Desde el punto de vista del tope salarial, no teníamos Mucha flexibilidad en absoluto".

 

 

En la actualidad, los Patriots están en el tercer puesto de la División Este de la Conferencia Americana, muy lejos de los líderes, Bills y Miami Dolphins. ¿Playoffs? ¡Muy lejos!