El sitio inglés Copa90 realizó un documental sobre la Vuelta a Boedo, la gesta histórica que moviliza a todos los hinchas del Ciclón.

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¿La Libertadores? ¿Campeonatos locales? ¿Mundial de Clubes? La gente de San Lorenzo cambia los títulos que tiene, y los que no, por esta vuelta. Que no es olímpica, pero es histórica.

Uno puede comprenderlo escuchando las canciones de la hinchada, una de las más ingeniosas del planeta, donde el tema es recurrente. Todas hablan del barrio de Boedo, lugar donde el club se inició allá por 1908, donde se forjó una fuerte relación entre el cuadro y el barrio, un lazo que iba más allá de los futbolístico.

“Boedo es San Lorenzo y San Lorenzo es Boedo”, explica el actor cuervo Martín Cutino, quien participa del documental de 12 minutos “San Lorenzo: la lucha de 40 años contra el exilio”, realizado por Copa90. Cuenta también con la participación del periodista inglés Jonathan Wilson, el presidente del club, Matías Lammens, y se puede escuchar la voz de Adolfo Res, hincha del Ciclón y uno de los pilares de la vuelta.

No hay día de la vida que no te acuerdes de San Lorenzo

“No hay día de la vida que no te acuerdes de San Lorenzo. Un ejemplo extremo en mi vida fue haber participado del conflicto bélico de Malvinas, y estaba presente una camiseta de San Lorenzo debajo del uniforme”, cuenta Res, fundador de la subcomisión del hincha.

El mismo gobierno militar que envió a aquellos jóvenes a Malvinas, fue el que despojó a los cuervos de su estadio en Boedo, el Viejo Gasómetro. Corría el año 1979 cuando Osvaldo Cacciatore, intendente de facto de Buenos Aires, ordenó el cierre del predio, alegando un plan de urbanización que incluiría viviendas y una escuela.

Algo que nunca ocurrió, ya que un año después las tierras fueron vendidas a la cadena francesa de supermercados Carrefour, transacción para la cual se eliminó la cláusula de prohibición para la instalación de comercios que tenía la ordenanza 35.172, mediante la cual se había producido el desalojo.

El nuevo estadio llevaría el nombre del Papa Francisco

Recién en los años 90 San Lorenzo pudo volver a tener cancha propia, el Nuevo Gasómetro, aunque lejos de casa, en el Bajo Flores. Pero Boedo siempre estuvo en la mente de sus hinchas. Al principio de unos pocos, pero se fue potenciando el fenómeno.

“Lo que parecía una locura, todos los hinchas nos fuimos convenciendo y hoy nos mantiene a todos unidos”, le cuenta Lammens a Copa90.

El 8 de marzo de 2012, mientras el club estaba a un paso del descenso, una 100 mil personas se acercaron a Plaza de Mayo, epicentro de la ciudad de Buenos Aires. Una manifestación masiva y pacífica, que demostraba que ya no eran algunos locos sueltos. Se había vuelto una causa nacional.

A punto tal, que a fin del 2012 la legislatura de la ciudad aprobó la Ley de Restitución Histórica, la cual reconoció el oscuro operar de aquella transacción realizada por un gobierno de facto y obligó a Carrefour a devolver las tierras, previa indemnización.

Desde entonces, los hinchas juntan dinero en un fideicomiso, comprando metros cuadrados simbólicos (18 cuotas de 180 pesos), para poder pagarle a la cadena el precio acordado: 150.000.000 pesos. Cuando se efectivice el pago, Carrerfour tendrá un plazo de 18 meses para dejar libre el 75% del predio, donde San Lorenzo podrá volver realidad su utopía: volver a tener un estadio en Boedo.