“Tengo dos pares botines y ahora me está por llegar uno más. Invertí como 200 lucas, original no compro, compro réplicas”

Iván Amaya tiene 26 años y es el único jugador del plantel de Argentino de Monte Maíz que hizo todas las inferiores en el club de Córdoba. Ahora, tiene la oportunidad de enfrentar a Boca por la Copa Argentina en un duelo histórico para la institución. En diálogo con BOLAVIP, contó la historia de sacrificio detrás de una carrera plagada de obstáculos.

Nacido en Florencio Varela, su familia se mudó al pueblo cuando tenía 6 años y desde entonces Argentino de Monte Maíz ha sido parte de su vida. “Estuve todo el tiempo acá. Bueno, tuve un pequeño paso por River que jugué dos meses en un campeonato de verano, a fines de 2010. Bueno, salí campeón y todo, pero después ya no seguí. Y después de los 16 años estuve en una prueba en el Instituto y también quedé, pero me tenía que volver. Fue en el mercado de invierno, me tuve que volver a buscar el pase de la escuela y del club, y la otra semana que estaba entrenando acá me rompí los ligamentos, así que no tuve suerte”.

-¿Cómo fue esa prueba en River y qué pasó?

-Yo llego mediante Vázquez, Jorge David Vázquez. Bueno, en ese momento estaba trabajando acá en el club, me consigue un lugar y así que bueno, fui, estuve dos meses y ese campeonatito. Jugábamos en Entre Ríos, lo ganamos, salimos campeones. Y bueno, después, creo que en 2011, no sé si cambia de dirigencia, cambian un poco los técnicos…. Después no me llamaron, digamos, para arrancar el año.

Amaya, que se desempeña como defensor, fue pieza fundamental del ascenso que el equipo logró en 2022 del regional al Federal A en una época en la que aún convivía su carrera de jugador con la de trabajador en una cerealera.

“Estaba en una empresa agrícola que es la de cereales, es la del presidente”, contó al aclarar que en 2023 firmó un contrato como profesional que le permitió dedicarse 100% al deporte. “No tenía días libres. Yo llegaba de viaje el lunes a la madrugada y el lunes a la mañana tenía que ir a trabajar. Y cumplir con los horarios. Trabajaba 8 horas. Por ahí 6 horas, por el tema de la comodidad que también me daba el presidente. Pero tenía que cumplir con el trabajo. Lo íbamos acomodando día a día, pero fue un año bravo en el individual”.

Aquel tiempo quedó atrás, pero desgraciadamente para él una lesión volvió a complicarle su carrera, justo después de haber firmado contrato como profesional. Por eso, se perdió el año pasado el cruce en Copa Argentina ante Estudiantes de La Plata.

Me rompí los ligamentos otra vez, la otra pierna, a fines de 2023 y entonces de 2024 que se jugó en enero contra Estudiantes no pude estar. Por ese motivo. Así que fue un golpe muy bajo. Así que el año pasado recién me reincorporé a lo último, jugué. Ya estoy óptimo para afrontar lo que es esta Copa”.

-¿O sea que contra Boca es un poco la revancha de lo que no pudiste jugar la vez con Estudiantes?

-Exactamente, sí, sí. La verdad que fue muy difícil porque era esa oportunidad para el club, que fue la primera vez en el partido de la Copa Argentina, pensé que no iba a tener otra chance. Pero bueno acá gracias a Dios en el club se están haciendo las cosas muy bien, se trabaja muy bien, está en constante crecimiento así que por ese motivo hoy estamos de vuelta en la Copa Argentina por el gran trabajo que se viene haciendo.

– ¿Y qué te pasa por la cabeza ahora que te vas a enfrentar a jugadores de la talla de Cavani o Ander Herrera?

-Es un lindo desafío. Sé que son jugadores de gran jerarquía, jugadores que tienen un recorrido enorme, sin dudas, pero lo tomo como un desafío. Por suerte, miedo no le tengo a nadie, a nada, pero hay que tener respeto, obviamente, pero es un lindo desafío para afrontar.

-¿Vas a ir a trabar o a meterle un caño de la misma manera que le hacés a un jugador de Villa Mitre?

-El que me conoce sabe que lo hago a eso. La verdad que vamos a ver en el momento porque la verdad lo que mejor voy a sentir es lo que está en la tribuna, me parece, la hinchada más grande del mundo. Eso sí va a ser un condimento lindo y hay que disfrutar. Después, en el fútbol somos 11 contra 11. Es como lo pienso así.

¿Sos hincha de Boca?

-Sí, sí, muy hincha de Boca.

Mirá, es un desafío también, ¿no? Jugar contra tu equipo.

-Sí, sí, sí. La verdad es que soy fanático de un partido. He ido a La Bombonera. Pero bueno, hoy toca defender a mi club de toda la vida. Así que… es un lindo desafío.

-¿Cuántas chances crees que tienen de ganarle a Boca?

-Va a ser muy difícil, hay que hacer un partido más que perfecto como se dice siempre. La verdad que si hay una mínima chance vamos a ir por ella. No es imposible, no estoy para tirar un porcentaje, pero creo que te puedo decir que nada es imposible.

-No importa cómo ganen, ¿no? penales, último minuto… ¿Cómo lo soñás?.

-No, la verdad que sueño con hacer un buen papel, un buen partido y si es ganarlo… Hay que meter un gol apenas arrancamos y aguantarlo. Yo como defensor voy a tener mucho laburo así que va a estar lindo para arremangarse y dar pelea.

-¿Y con respecto a que te vean de otro club, estás con esa expectativas de jugar un gran partido contra Boca que sea como una vidriera para pegar el salto o estás cómodo donde estás?

-No, sin dudas que es una vidriera, lo pensamos así todos y yo lo tengo más que asumido. La verdad que estaría lindo, estaría lindo haber vivido otra experiencia afuera acá del club, sin duda que acá me siento muy querido, muy cómodo. La verdad que me trata muy bien la gente. Me conocen todos, así que… Bueno, mi club también sigue apostando por mí. Sabemos que es una vidriera ese partido, lo va a ver todo el mundo. Es Boca. Así que va a estar lindo para subir, si Dios quiere.

-¿Ya pensaste a quién le vas a pedir una camiseta, lo hablan entre ustedes con los compañeros del equipo?

-No, no se habló nada, no se habló nada, yo creo que lo voy a ver ahí en el partido obviamente. Me gustaría a Edinson o tal vez Marquitos Rojo, también me gustaría hablar con Marcos Rojo. Son jugadores bueno, mundialistas. No se habló con los chicos, estaría bueno hablarlo para que no sea un quilombo en la cancha. Creo que cada uno se va a querer llevar un recuerdo de lo que va a hacer.

-Cuando River perdió con Temperley en Copa Argentina el año hablé con uno de los jugadores y me había contado que el día anterior se tuvo que ir a comprar botines porque tenía un solo par y se la habían roto. ¿Vos cómo estás de calzado?

-La verdad es que por el momento tengo dos pares. Me tiene que llegar uno más, hay unos míos que seguramente en una de esas use para el partido, vamos a ver el piso de la cancha, pero si no tengo, tengo unos que compré al fin de año. Cuando me dieron el alta los compré y los tengo ahí intacto así que.

-¿Cuánto te salieron esos botines o cuáles te compraste?

-Original no compro, compro réplicas, son 200 lucas.