Luego de una primera parte de temporada bastante irregular, Aston Villa culminó la misma con un enorme sprint final en donde pasó de coquetear con el descenso a terminar clasificando a la UEFA Conference League al quedar en la séptima posición de la Premier League.

Y en esta gran mejoría no solo tuvo mucho que ver el cambio de entrenador con el arribo de Unai Emery, sino también el superlativo nivel de Emiliano Martínez post Mundial, donde regresó siendo campeón del mundo y consagrándose como el mejor arquero del mundo con el premio The Best. Y justamente por este rendimiento de Dibu es que su futuro en Aston Villa se puso en duda.

Es que clubes como Chelsea, Manchester United y Tottenham se mostraron fuertemente interesados en fichar al marplatense, pero entre los tres eran los Spurs los que más pujaban para quedarse con Emiliano Martínez buscándolo como un reemplazo para Hugo Lloris, quien ya definió que se irá del club londinense y en el mismo pretenden encauzar un proyecto que fracasó en la reciente temporada con futbolistas de mucha personalidad como lo es el Dibu.

Sin embargo, en las últimas horas desde Tottenham cambiaron de parecer y, en lugar de agilizar por el pase del argentino, desde Spurs acordaron un trato formal con otro arquero al haber llegado a un acuerdo con el español David Raya, arquero de Brentford que ya tenía el boleto de salida de dicho club. Para que esto sea oficial resta la negociación entre los clubes en donde se habla de un traspaso de aproximadamente 40 millones de euros.

Esto aleja totalmente la posibilidad de que Emiliano Martínez arribe al Tottenham, y en paralelo el Manchester United también se encuentra avanzando con otro arquero, siendo este el portugués Diogo Costa. Chelsea solo iba a avanzar por Dibu si se desprendía de Kepa Arrizabalaga o de Edouard Mendy y no han tenido ofertas por ninguno de los dos, por lo que no irían a la carga por otro golero en este mercado de pases. Así, todo parece indicar que finalmente el argentino seguirá en el Aston Villa, algo que hace semanas parecía imposible.