Franco Colapinto se convirtió en el primer piloto argentino en llegar a la Fórmula 1 en más de 20 años, luego de que Williams Racing anunciara su llegada a la máxima categoría en reemplazo de Logan Sargeant. Su ascenso fue verdaderamente meteórico: en el mismo año, debutó como titular en la Fórmula 2, ascendió para competir en pruebas y firmó con la escudería británica para competir en lo que resta de calendario de F1 en la presente temporada.

Difícilmente se pueda llegar a este nivel del deporte de motor recorriendo el camino solo, por no decir prácticamente imposible. Al notable talento del nacido en Pilar, demostrado en el circuito, se le sumó la mano de otra personalidad argentina destacada a nivel mundial, Bizarrap.

El reconocido DJ, quien ha colaborado con Shakira, Nicky Jam y Residente, entre otros, fue parte esencial para que Franco tuviera el apoyo necesario para seguir adelante en el automovilismo. “Mi viejo me mandó una nota que decía que Colapinto necesitaba sponsors y lo llamé. No nos conocíamos, pero lo llamé y le pregunté cómo lo podía ayudar, si lo contactaba con gente o no sé”, contó el Biza para ESPN.

El fanatismo de Colapinto por Boca

Colapinto nunca escondió los colores a los que le confesó su amor, el azul y oro. En la Fórmula 2, categoría previa a la que acaba de ascender de la mano de Williams Racing, Franco eligió portar el n°12. “Quiero dejar a ‘boquita’ bien arriba este año”, fueron las palabras del piloto para demostrar, una vez más, su cariño al Club Atlético Boca Juniors.

“Ahora sí ya me puedo ir tranquilo. La reunión más esperada de mi viaje a Argentina”, posteó la nueva cara de Williams Racing durante una visita reciente al país, donde cumplió el sueño de pisar el césped de la Bombonera que tantas veces vio por TV.

Del cuatriciclo que le regaló su padre a subirse a un auto de la F1

Con tan solo cuatro años de edad, el padre de Franco, Aníbal Colapinto, le regaló a su hijo su primer cuatricilo. “Me iba comprando cuatris cada vez más grandes. Me encantaba ir a las carreras del TC porque mi viejo tenía un equipo hasta que a los 10 empecé a correr en kartings”, le dijo a TN tiempo atrás.

Desde sus inicios en el karting, donde destacó en torneos internacionales, Colapinto ha escalado rápidamente en la pirámide del automovilismo, compitiendo en categorías como la Fórmula 4, Fórmula Renault Eurocup y Fórmula Regional Europea. Sus excelentes resultados y su consistencia lo llevaron a ser considerado una de las promesas más brillantes del automovilismo argentino.

A partir del Gran Premio de Monza, uno de los circuitos más ricos en la historia de la Fórmula 1, Colapinto correrá en un monoplaza de la Fórmula 1 y será el primer argentino en más de 20 años en hacerlo, marcando un hito para nuestro país que será recordado en las décadas venideras.

Un triciclo: el primer contacto entre Colapinto y los motores

Como cada leyenda que deja su huella en el automovilismo a nivel mundial, Franco Colapinto también conoció lo que posteriormente sería su gran pasión a corta edad, más precisamente a los tres años.

“Fue la primera vez que lo subimos a un triciclo que decidimos con Aníbal regalárselo para su cumple. Tenía motor eléctrico”, le contó Andrea Trofimczuk, madre del piloto argentino, a Infobae.

“Lo llevamos a una juguetería y nunca se había subido a nada que tuviese motor o algún tipo de propulsión más allá de sus pies. El empleado de la juguetería lo sentó y esperó para poder llevarlo y acompañarlo para pasear un poco por la juguetería y que lo pudiera probar. Y de golpe Franco lo aceleró, empezó a esquivar entre las góndolas y no lo podía parar nadie. Estaba como loco, como si siempre se hubiese subido a algo así. Era su primer contacto con algo a motor. Desde chico tuvo esa habilidad increíble para conducir”.

Así como existe el sustento económico para sobrevivir en las mayores categorías del automovilismo, también está el familiar y los padres de Colapinto han sido un pilar fundamental en su desarrollo como piloto, brindándole el apoyo necesario para alcanzar sus sueños.

Ejemplo de perseverancia y dedicación, el nacido en 2003 promete ser una figura destacada no solo en la Fórmula 1 sino como representante histórico del automovilismo argentino, si es que ya no lo es tras el reciente anuncio de Williams.