Duodécimo en su debut en Monza, octavo en Baku, undécimo en Singapur, décimo en Austin y otra vez duodécimo en México. Las primeras cinco carreras de Franco Colapinto en la Fórmula 1 con Williams fueron no menos que extraordinarias, y un absoluto contraste a las últimas cuatro, con tres abandonos, comenzando en el Gran Premio de Brasil.
Y si bien el argentino poco tuvo que ver en los accidentes en Qatar y Abu Dhabi que le costaron cualquier chance de hacer una buena carrera, el FW46 llegó bastante dañado a aquel momento por los choques que tuvo en Interlagos y Las Vegas. Y la realidad es que el equipo poco pudo hacer para ponerlo a punto, especialmente luego de que la FIA le negara un pedido especial.
De acuerdo a lo reportado por el medio alemán Auto Motor, la escudería presentó un requisito de excepción a la FIA, con el cual buscaban borrar algunos de los daños que sufrió su auto para poder trabajar en recuperarlo y desarrollar nuevas piezas sin superar el límite salarial.
Superar el límite salarial implicaría que Williams daría inicio al 2025 con una penalización en el límite de la próxima temporada, y los de Grove tendrían reducido su capital. James Vowles no estaba dispuesto a ello y, es por ello, que tuvieron que armar el auto de Colapinto con los repuestos que tenían y no volvió a ser el que Franco tuvo en sus primeras carreras.
Franco Colapinto le costó más dinero a Williams que Logan Sargeant
Si bien James Vowles recalcó al finalizar la temporada que fue un acierto darle el puesto de Logan Sargeant a Franco Colapinto, la realidad marca que el argentino destrozó el auto aún más de lo que lo hizo el norteamericano en su paso por la Fórmula 1.
En nueve carreras, se estima que el costo de reparaciones por los accidentes de Colapinto fue de 3,4 millones de dólares, mientras que Sargeant fue despedido apenas superó los 3 millones en daños. No obstante, Alex Albon, dueño de la otra butaca en un FW46 esta temporada, le costó a Williams incluso más que Sargeant y Colapinto.
Se estima que los gastos de Williams en reparaciones por accidentes del tailandés ascendió a más de 4,6 millones de dólares, sólo por detrás de los 4,8 que tuvo que invertir Red Bull en rearmar el auto de Checo Pérez esta temporada.