Los defensores de que la edad es solo un número podrán valerse en el boxeo del ejemplo de Manny Pacquiao, quien el pasado sábado hizo en Las Vegas su regreso a los cuadriláteros con 46 años, tras pasar los últimos cuatro en el retiro, y sorprendió con su nivel ante Mario Barrios en un combate de título mundial que finalizó con empate en las tarjetas de los jueces, pero en el que fue el filipino quien mereció más.
En contraposición, podrán tomar también el ejemplo de Josh Taylor, uno de los únicos diez campeones mundiales indiscutibles en la era de los cuatro cinturones (AMB, FIB, OMB y CMB) que ha decidido poner fin a su carrera con nada más que 34 años y tras una seguidilla de tres derrotas consecutivas: ante Teófimo López, Jack Catterall y Ekow Essuman.
Tal y como expresó a través de sus redes sociales al confirmar la decisión de poner fin a su carrera profesional, la misma está ligada a la recomendación médica a raíz de un problema ocular que viene sufriendo desde hace tiempo. “Asumo que no es un mensaje fácil de escribir, pero por consejo de mis médicos, es lamentablemente necesario”, escribió en Instagram.
Y continuó: “Como se ha publicitado antes, he tenido un problema recurrente con mi ojo que, desafortunadamente, significa que ahora debo poner fin a mi carrera o arriesgarme a perder la vista. Aunque el luchador en mí siempre quiere seguir boxeando, sé que debo escuchar a los profesionales médicos y protegerme de mí mismo. No es la forma en que quería despedirme, pero tengo que escuchar a los médicos y a quienes me rodean“.
Si bien no hay un registro específico sobre cuándo se ocasionó la lesión ocular de Josh Taylor, el año pasado se había sometido a una intervención quirúrgica a causa de la misma tras la derrota en decisión unánime ante Jack Catterall en Inglaterra.
La carrera de Josh Taylor
Tan solo 18 peleas como profesional le demandó a Josh Taylor marcar un hito en la historia del boxeo al volverse campeón mundial indiscutible en la división de peso súper ligero, es decir conquistar los cuatro grandes cinturones de dicha categoría, gracias a su victoria sobre José Carlos Ramírez por decisión unánime en mayo de 2021.
El debut del escocés había tenido lugar en julio de 2015, imponiéndose por nocaut técnico en el segundo round a Weah Archiebald en Estados Unidos. Su primer título mundial lo conquistó en mayo de 2019, imponiéndose a Ivan Baranchyk en decisión unánime para quedarse con el cinturón de la FIB en las 140 libras.
Meses más tarde derrotó en fallo dividido a Regis Prograis para quedarse también con el cinturón del CMB y fue ante Ramírez que conquistó los dos que le faltaban para ser indiscutible: el de la AMB y el de la OMB. Solo una vez pudo defender esos cuatro cinturones, imponiéndose en una polémica decisión dividida a Catterall.
Su primera derrota llegó en junio de 2023 ante Teófimo López y a partir de allí hilvanó otras dos, ante Catterall en la revancha y ante Ekow Essuman tras su decisión de subir a la división de peso welter, antes de tomar la decisión de poner fin a su carrera.
