Jake Paul se impuso en decisión unánime a Mike Tyson al cabo de ocho rounds en el largamente promocionado evento debut de Netflix transmitiendo en vivo una velada de deportes de combate, que si de boxeo se trata en realidad tuvo como pelea más destacada la revancha entre Katie Taylor y Amanda Serrano, con victoria para la británica.
Envalentonado por haber conseguido la undécima victoria desde que se lanzó como boxeador, ante una leyenda del deporte, pero de 58 años, el influencer planteó un desafío para otras tres superestrellas, dos de ellos boxeadores en actividad y un legendario campeón de artes marciales mixtas.
El combate que Jake Paul tiene desde hace tiempo entre ceja y ceja es ante Conor McGregor, primer peleador en ser doble campeón de UFC. Sin embargo, acusó al irlandés de no querer tomar la pelea. “Él (Conor) nunca haría eso. Es divertido escuchar que McGregor está asustado y que nunca boxearía con Jake Paul, pero es la puta verdad. Sería un trabajo muy fácil para mí”, señaló.
Muchas fueron las consultas que recibió el Niño Problema sobre la posibilidad de organizar un combate ante Saúl Canelo Álvarez, algo que su agente se encargó de confirmar. “Yo no lo necesito. Él me necesita a mí”, agregó Paul sobre las negociaciones que podrían iniciarse con el equipo del mexicano.
Por último, se planteó la posibilidad de un combate entre Jake Paul y Gervonta Davis, actual campeón mundial de peso ligero de la AMB quien desde sus redes sociales atacó al influencer tras su victoria ante Tyson. “Eres un completo idiota por esto y ni siquiera hiciste el trabajo”, le escribió desde sus redes sociales.
“Estoy disponible. Vamos a arreglarlo. ¿No hay límite de altura en el boxeo?”, respondió Jake Paul con Ironía, haciendo referencia al tamaño del campeón mundial estadounidense, considerado como uno de los boxeadores con mayor poder de demolición de la actualidad.
El agradecimiento de Jake Paul a Tyson
Apenas finalizado el combate, Jake Paul pidió el micrófono para dedicar unas palabras a Mike Tyson, quien a sus 58 años aceptó el combate. “En primer lugar, Mike Tyson, es un gran honor. Rindámonos ante Mike, hermano. Él es una leyenda. Es el más grande que jamás lo haya hecho. Él es el GOAT. Lo admiro. Estoy inspirado en él y no estaríamos aquí hoy sin él. Este hombre es un ícono y es un honor poder pelear contra él. Y obviamente es el hombre más duro y malo del planeta, así que fue realmente difícil como esperaba que fuera”, expresó.