Vélez hizo una heróica y, contra todo pronóstico, dejó afuera en octavos de final de la Copa Libertadores al River de Marcelo Gallardo. Es cierto, la polémica estuvo a la orden del día por un gol anulado de manera dudosa a Matías Suárez por una mano a la hora de concretar el cabezazo que culminó en el tanto. Sin embargo, eso no quita méritos de la gran serie que hizo el Fortín al anular completamente al Millonario y ser mejor en los 180 minutos.

Para quien fue verdaderamente especial esta llave fue para Lucas Pratto. Muy identificado con ambos clubes, siendo ídolo contemporáneo de Vélez y recordado de la mejor manera en el conjunto millonario debido a sus dos goles en la final de la Libertadores 2018 ante Boca, al Oso le tocó estar del lado fortinero en esta disputa y nuevamente integró la fila del club vencedor.

 

Esta tarde, luego del paso de Vélez a cuartos de final, el delantero de 34 años dialogó con TyC Sports, donde reveló cuestiones íntimas del partido ocurrido en Núñez, junto con una insólita anécdota de algo ocurrido en el campo de juego, donde confesó que casi se agarraba a piñas con dos futbolistas de River.

"La realidad es que cuando estás afuera de la cancha tenés más ansiedad, nerviosismo. Pasó lo que pasó con el gol con la mano, lo del VAR. Y los jugadores de River estaban pidiendo muchas cosas. Si nos teníamos que ir a las manos, nos íbamos a ir a las manos", comenzó para hablar de la tensión del momento en el partido. Pero luego, fue más preciso sobre lo que él protagonizó con Maidana y Paulo Díaz, con quienes supo ser compañero.

 

Sobre esto, de manera cómica con lo sucedido ya en el pasado, Pratto soltó: "Antes de que se hiciera mi cambio estuve a punto de irme a las manos con Paulo (Díaz) y Jonathan (Maidana). En el fútbol tenemos las revoluciones a mil, y a mí no me gusta que traten mal a nadie, porque yo no lo hago. Entonces. sentí en ese momento que le estaban faltando el respeto a Lucas Orellano. Defendiéndome, discutimos. Afuera de la cancha están las amistades, pero adentro no". ¡Tremendo!