Para mí, fue penal de Nicolás Otamendi contra Colombia. El experimentado defensor de la Selección Argentina hizo todo lo que no debe hacer un jugador en su posición. No podes tirarte adentro del área para intentar recuperar la pelota y menos para marcar a un delantero.

Hay veces que, por ser argentinos, no admitimos si una jugada fue penal en contra o decimos que “nos están robando”. Para mí, tanto Piero Maza como el VAR estuvieron bien: el contacto existió y después James Rodríguez hizo lo que hizo con su zurda mágica, remate imposible para Dibu Martínez.

Colombia nos complica muchísimo: en Copa América 2024 necesitamos el alargue para ganarle la final; antes estuvo un Dibu colosal para pasar de semis por penales; antes, en el primer cruce de Scaloni, nos ganaron.

Hoy podríamos haber ganado si Lautaro Martínez estaba más fino o si Julián Álvarez metía la que tuvo en el primer tiempo, así como pudimos haber perdido 3-0 contra el gran equipo que armó Néstor Lorenzo.

Si bien pienso que hoy la Selección sufrió la ausencia de ese toque fino de Lionel Messi, insisto que la Argentina de Scaloni no es Messi-dependiente: contra Colombia estuvo a la altura y dio la cara para aceptar la derrota. Eso me gustó. Igual, el partido que había que ganarles, se ganó en Miami.