Este domingo, bajo la órbita de la vigésimo tercera fecha de La Liga de España, Sevilla se encontró frente a frente con Osasuna buscando tres puntos vitales de cara a su público, con el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán como escenario.

Sin embargo, al equipo comandado estratégicamente por Jorge Sampaoli, que no está teniendo un buen desempeño en el mencionado certamen doméstico, no le salieron las cosas y se terminó quedando con las manos vacías.

En definitiva, los de Pamplona se impusieron por 3-2 al cabo de un auténtico partidazo. David García, Fernando en contra y Abde anotaron para la visita, mientras que Nemanja Gudelj y Youssef En-Nesyri lo hicieron para los de Andalucía.

En ese contexto, en la recta final del partido, los ánimos no parecían los mejores entre los jugadores de Sevilla. Y eso se pudo comprar de forma contundente a los 41 minutos de la etapa complementaria, con una actitud de Marcos Acuña.

Es que algunos jugadores de Sevilla estaban leyendo un papel con indicaciones que había enviado Sampaoli desde el banco de suplentes. Y allí fue cuando el campeón del mundo con la Selección Argentina lo agarró y lo revoleó.