Gabriel Omar Batistuta es una de las máximas glorias que tiene la Selección Argentina . Detrás de Lionel Messi , es el máximo goleador histórico de la albiceleste con 54 tantos y ganó cuatro títulos con la selección (Copa América 1991 y 1993, Copa Confederaciones 1992 y Copa de Campeones 1993).
El Bati es catalogado como uno de los mejores jugadores argentinos de la historia, pero a la hora de elegir al mejor futbolista de todos los tiempos, él mismo tiene muy clara su elección. Tiempo atrás, en diálogo con Perform, aseguró que esa distinción es para Diego Armando Maradona.
“Él [Maradona] es el mejor de todos por un montón de cosas. Técnicamente puede que sea mejor Messi, no hay diferencias. Pero desde el carácter influía más en el juego de lo que lo puede hacer Messi solo jugando”, aseguró Batistuta. “Para mi hoy Leo es el mejor del mundo pero de la historia es Maradona. Mi opinión tampoco vale tanto, es una sola”, afirmó en 2019.
Para Batistuta, no hubo ni hay nadie mejor que Maradona.
El recuerdo de Maradona que es inolvidable para Batistuta
El Bati tiene un recuerdo imborrable de Maradona que lo acompañará por siempre, y así lo reveló en esa entrevista: “Contra Grecia en 1994, Maradona estaba adelante mío, representando a Argentina, él como capitán. Era un sueño, ya está“, relató. “Hice tres goles [en ese partido] pero no me los acuerdo, solo me acuerdo de Diego. Mi imagen es esa y para mí es el mejor de todos. Mi recuerdo es él.”
Batistuta cerró su respuesta ante la pregunta de forma categórica: “Quizás si hablas con los compañeros de Messi te dirán que es lo más grande. Yo jugué con Maradona, no con Messi.”
Desde entonces, claro, Messi ha liderado a la Selección Argentina a ganar dos Copas América, una Finalissima y su tercera Copa del Mundo. Es el máximo goleador (112 hasta el momento) de su historia y le devolvió la gloria a la albiceleste, al volver a conquistar títulos tras 28 años de sequía.
Messi hizo méritos desde aquel entonces para cambiar la postura del Bati.
Habrá que ver si cambió la postura del Bati, pero claro está que Messi ha hecho lo suficiente como para torcer la balanza.