Como no podía ser de otra manera, la intensidad se hizo presente de manera contundente en el Superclásico entre River Plate y Boca Juniors correspondiente a los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional. Es que todos los protagonistas y también los espectadores son conscientes de la magnitud de este espectáculo.

En ese contexto, las emociones estuvieron a la orden del día desde un primer momento en el Estadio Mario Alberto Kempes de la provincia de Córdoba, donde el Millonario y el Xeneize salieron al campo de juego con el objetivo en común de quedarse con el último boleto disponible rumbo a las semifinales de dicho certamen doméstico.

Bajo esa órbita, Miguel Borja abrió la cuenta para los dirigidos por Martín Demichelis cuando transcurrían jugados solamente 10 minutos del primer tiempo. El colombiano culminó una extraordinaria maniobra individual de Claudio Echeverri, definiendo con un remate tan seco como potente y bien colocado de cara a los hinchas de River.

Posteriormente, cuando el período inicial parecía sentenciado en favor de los del barrio porteño de Núñez, Luis Advíncula desbordó de forma magnífica por el sector derecho y mandó un centro hacia atrás. El mismo fue capitalizado por Miguel Merentiel, que empujó la pelota para estampar el 1-1 y equilibrar la historia.

El festejo de Miguel Borja en el primero de River.

El festejo de Miguel Borja en el primero de River.

Pero lo cierto es que los primeros 45 minutos también tuvieron condimentos de todo tipo. Desde picardías hasta momentos un tanto tensos. Inclusive, el propio Borja, uno de los goleadores de la etapa inicial, se despachó con una broma tan sorprendente como inesperada contra uno de los integrantes de la delegación de River.

En plena disputa del Superclásico entre los dos equipos más importantes del fútbol argentino, los protagonistas se tomaron un momento para beber agua. Allí fue cuando el internacional con la Selección Colombia recibió una de las botellas para poder hidratarse. Pero tomó por sorpresa a un colaborador, mojándolo y generando risas.

Claro está, inmediatamente, la imagen que se vino a la mente fue la de Ezequiel Lavezzi haciendo lo mismo con Alejandro Sabella en la Copa del Mundo de Brasil 2014, durante uno de los compromisos de la Selección Argentina que terminó alcanzando la gran final de dicho campeonato. Sí, un momento que quedó en la memoria.