Colo Colo recibió hace algunas horas un doble mazazo de cara a la Libertadores y también en el fútbol chileno. Primero, la Conmebol ordenó que para el partido contra Boca Juniors, el club albo tiene que cerrar las tribunas de Arica y Lautaro más el pago de una multa de 95 mil dólares por infrigir varias normas. Además, la Segunda Sala del Tribunal de Disciplina determinó que en el torneo local, el club tendrá que acatar el castigo de tres fechas sin público en el Monumental.

Una semana convulsionada en materia de seguridad para los albos. El presidente Alfredo Stöhwing, quien fue el martes ratificado en su cargo al mando de Blanco y Negro, tiene que apostar por cuidar la integridad de los hinchas para el partido ante Boca Juniors. El timonel lamentó la medida.

“Muy lamentable. Podría haber sido peor, pero eso no nos satisface. Es una lástima jugar sin toda nuestra hinchada un partido tan importante como lo es el con Boca Juniors. Esto es un reflejo y la gente tiene que entender el daño que le hacen a los verdaderos hinchas, porque los que hacen desórdenes no son hinchas. Encuentro que es una terrible pena no poder jugar un partido tan importante sin todo nuestro público y que sea una fiesta”, expresó el presidente en TNT Sports.

Stöwhing sabe que el equipo popular tiene que evitar todo tipo de malos comportamientos, ya que las miradas están clavadas en el Monumental debido a la mala actitud de los mal llamados hinchas que llegan hasta la ruca en Macul. A raíz de ello, el presidente de Blanco y Negro realizó una directa solicitud.

“Es lógico hacer esa advertencia. Esperemos que se eviten los malos comportamientos y estamos tomando distintas medidas para tratar de reforzar la seguridad lo más que podamos. La solución de fondo es que vuelva Carabineros y la policía al estadio”, agregó.

Colo Colo tendrá que cerrar dos localidades para jugar con Boca en Libertadores (Photosport)

La queja de Stöwhing radica también en que esta situación causa estragos millonarios para los albos. En el partido con Palestino, el presidente de ByN adelantaba que la pérdida era de mil millones de pesos. Ahora, con el cierre de dos tribunas en Libertadores ante los xeneizes, la cuestión se resiente para las arcas albas.

“Un perjuicio enorme deportivo y económico muy grande. Esperamos que la gente se de cuenta del daño que producen y a trabajar todos y a estar todos unidos para que estas cosas no vuelvan a suceder, a mejorar el trabajo en seguridad para volver a jugar todos nuestros partidos como corresponden con toda nuestra verdadera hinchada como público”, terminó Stöwhing.