Javier Parraguez fue a Brasil, anotó varios goles en el Sport Recife y decidió volver al fútbol chileno por una revancha tras la abrupta salida de Colo Colo. El Búfalo llegó a Coquimbo Unido y arrancó como titular con Fernando Nano Díaz. Sin embargo, su salida de contexto y de libreto ante la Universidad Católica le puede pasar la cuenta al delantero.
Tras el gol de la victoria de Rubén Farfán, Parragol se volvió loco, se le soltó la cadena y mandó a la punta del cerro al árbitro Benjamín Saravia, quien no dudó en mostrarle la cartulina roja. En ese momento, en la transmisión televisiva, la situación no fue advertida y el hecho dejó a todos algo descolocados.
Con el paso de los días, y con informe de Saravia en mano, se dio a conocer qué fue lo que verdaderamente ocurrió con Parraguez, quien no encontró nada mejor que decirle de todo al árbitro, que dejó todo consignado en su escrito.
“Emplear lenguaje ofensivo, grosero u obsceno y/o gestos de la misma naturaleza; Después del gol me encara y me dice: ‘El gol es para ti, cag…(sic)“, sentenció Saravia.
Además de una sanción a Parraguez, que va fijo en la próxima sesión del Tribunal de Disciplina, Saravia también acusó a los encargados del Francisco Sánchez Rumoroso por una particular situación, que igualmente consignó en su manuscrito.
“No hay agua en el sector de duchas en el camarín de árbitros y en elsector de duchas y baño de árbitros no hay iluminación”, manifestó.
