Siguen los coletazos tras el especial Superclásico entre Colo Colo y Universidad de Chile que en cancha terminó igualado sin goles, pero que todavía se habla de los sucesos extras que ocurrieron sobre todo desde las tribunas con lanzamiento de objetos peligrosos y además, las bengalas y fuegos artificiales encendidos.

Situación en la cual, nadie pareciera tomar las riendas o hacerse cargo de lo que realmente pasó durante el desarrollo del partido mayor de nuestro balompié donde de manera afortunada, no hubo heridos ni complicaciones mayores.

Pero siguen los desmanes y el mal comportamiento en nuestras canchas, ¿Quién tiene la responsabilidad mayor? Para el ex árbitro chileno Carlos Chandía, en diálogo con Bolavip, claramente los primeros en asumir deben ser los dirigentes del fútbol chileno.

“La responsabilidad la tienen los dirigentes. Mano dura con los dirigentes quienes son los queorganizan cadaevento, entonces ellos deben tener algún tirón de oreja. No puede ser que se la lleven así, nomás, sostuvo el actual alcalde de Coihueco.

Momento exacto en que Leandro Fernández recoge el cortaplumas (Guillermo Salazar)

El edil, de paso, defendió en cierta medida la decisión del juez Christian Garay en no determinar la suspensión del partido y que la culpa no siempre es de ellos. “No siempre la culpa es de los árbitros. El árbitro evidentemente tiene que suspender el partido, tiene que entregar todo el informe que corresponde para que después la autoridad tome la respectiva decisión. Pero es un tema que involucra a todos”, sostuvo Chandía.

Finalmente, el ex árbitro FIFA expuso que acá es el cuadro albo el que debe recibir los mayores castigos por lo ocurrido. “¿De dónde tiraron el cortaplumas? Sanción a Colo Colo, entonces. Esa responsabilidad es de los dirigentes y la responsabilidad también de la policía. No se si habrá policía en el estadio, pero si tú vas a un recinto y no tienes mínimas garantías de seguridad, ¿Qué pasaría si un tipo apuñale al que está al lado por algo que pasó?”, enfatizó Chandía, para rematar con un concepto bastante preocupante considerando el ritmo de lo que se vive en los recintos deportivos “¿Cómo vas a entrar con un cortapluma? falta que entren con pistola, con revólver al estadio”, cerró el alcalde.