Han pasado casi 72 horas de la suspensión del duelo entre Universidad Católica y Universidad de Chile luego de la cobarde agresión sufrida por el portero azul, Martín Parra, quien debió abandonar el recinto en ambulancia tras sufrir un trauma acústico agusto luego de las bombas de estruendo que cayeron cerca de su persona.

A la molestia que existe en la U por tener que jugar el partido ante los cruzados por Copa Chiletras lo determinado por la Federación y lo que ellos señalan, el poco interés por el estado de salud del deportista, como también el trato de algunos de sus jugadores, se han sumado otras aristas en esta batalla.

Pues bien, en el Centro Deportivo Azul manifestaron otra situación la cual expusieron durante las primeras horas del viernes y a través de una carta dirigida al presidente de Cruzados, Juan Tagle y firmada por autoridades del club, argumentan una serie de episodiosque vivió la institución a nivel general el día miércoles recién pasado.

En la ocasión, dan cuenta de una serie de irregularidades que sufrió la dirigencia de Azul Azul y el trato que recibieron de su par de la Católica. La incomodidad radica en que los regentes no tuvieron un lugar específico para que ellos observasen el partido, si no en medio de hinchas de la UC con lo que el lugar no era seguro.

Carta de la dirigencia azul fue enviada a Juan Tagle (Archivo)

Sumar a aquello, que no se le autorizó el ingreso a dos guardias que acompañan a Michael Clark, algo que tres días antes en Santa Laura Universidad de Chile sí accedióy le permitióingresar a personas que no estaban consideradas preliminarmente. Como también el servicio de alimentación y seguridad estuvo siempre garantizado para dirigentes y personal del cuadro precordillerano, algo que en la U entienden, no ocurrió en el puerto.

Es por eso que Universidad de chile dicen sentirse decepcionadoscon lo ocurrido, donde hasta la hora no ha exisitido algún pronunciamiento de reconocer los actos. Así, una nueva batalla en estos días tan convulsionados donde dirigentes y cuentas oficiales en redes sociales se han dirigido mensajes de uno u otro lado.