Inolvidable. Así será recordada la gran final de Roland Garros que animaron el italiano Jannik Sinner (1° del ranking ATP) y el español Carlos Alcaraz (2°), que tras más de 5 horas de batalla coronó como campeón al nacido en El Palmar, Murcia por parciales de 4-6, 6-7, 6-4, 7-6 y 7-6.
La gran final en la arcilla parisina será recordada por los electrizantes altos y bajos, como cuando el italiano desaprovechó tres match points y perdió la oportunidad de levantar el primer Roland Garros de su carrera.
Y es que no cabe duda que ese fue uno de los momentos más fuertes que ha vivido la arcilla del Philippe Chatrier: un Carlos Alcaraz 3-5 y 0-40 abajo en el cuarto set al frente de un Jannik Sinner a sólo una pelota de conquistar el Abierto de Francia.
Pero la historia quiso un destino distinto. El español de 22 años levantó tres pelotas de partido y sacó adelante una definición increíble. ¿Cómo fue posible? Muchas veces las finales esconden momentos imperceptibles para las cámaras de televisión y que sólo son captados por quienes están a pie de cancha. Como es el caso de lo vivido por Juan Carlos Ferrero, coach de Carlos Alcaraz.
Tras la final, el extenista reveló el momento exacto en que su pupilo se dio cuenta que ganar el título de Roland Garros era posible: “Con 0-40 y tres match points en contra, nos mira y nos saca el puño. Piensas… ‘No, esto no puede ser’. El tío sacó ese juego y siguió creyendo hasta el final. Creo que nos ha dado una lección de superación”, señaló.
En conferencia de prensa, el murciano se refirió a ese momento extremo. “Creo que los verdaderos campeones se forjan en situaciones en las que gestionas esa presión, esas situaciones, de la mejor manera posible… Eso es lo que los verdaderos campeones han hecho a lo largo de sus carreras. Solo intento sentirme cómodo en las situaciones de presión y no tenerles miedo”, sentenció.