Roberto “Pájaro” Gutiérrez es uno de los buenos delanteros que existen en el fútbol chileno. El oriundo de Curacaví, que hoy defiende a Cobreloa en Primera B, dialogó con Deportes 13 sobre el club de sus amores y el que lo formó, Universidad Católica.
El goleador fue consultado sobre el presente que está pasando el elencoque dirige Cristián Paulucci, donde no estuvo ajeno sobre las cuatro derrotas vividasprevio al Clásico Universitario, pero tiene la confianza que el equipo irá poco a poco retomando el nivel de las temporadas pasadas.
“La verdad es que ha sido difícil en la parte futbolística, los números están ahí, hace un par de años que no se arrancaba de esta manera. No hay que desconocer que existe un bajón en lo que es el fútbol, lo que venía mostrando la institución con años consecutivos de regularidad”, inició explicando.
Este año en el comienzo no se ha logrado, pero en lo personal tengo plena convicción de que hay un buen grupo. Solamente falta lograr un par de triunfos que nos permitan volver a lo que ha sido la continuidad de Católica durante los últimos años”, añadió el delantero.
Otro de los puntos que tocó Gutiérrez fue en relación al grupo que sorteó la UC en Copa Libertadores y donde esta semana tiene su debut copero ante Talleres de Córdoba en Argentina.
“El grupo tiene rivales muy complicados, pero creo que estamos todos conscientes de que en la Copa Libertadores están los mejores. En base a eso, es muy improbable que te pueda tocar un grupo fácil. Los equipos que letocan a Católica son todos complejos hayque viajar a Brasil, Perú, Argentina. Lo primordial es hacerse fuerte de local en Chile, para luego ir a rescatar la mayor cantidad de puntos en el extranjero”. opinó.
En cuanto a los últimos años exitosos que ha tenido la institución, lo retribuye a los torneo obtenidos en el 2016, donde pudieron levantar el primer bicampeonato del club. Él cree que es el paso inicial para lo que vino después.
“Existió algo en la mentalidad que cambió dándonos la posibilidad de ser campeones. Todo parte con el primer bicampeonato conseguido por la institución que eliminó esa mochila de segundos lugares que cargaba el club desde 2011 hasta 2015, después de esos campeonatos ganados todos los jugadores llegaron a una institución que era bicampeona. Hoy, la mayoría podría pensar que fue un trabajo que se hizo, pero tras no conseguir los objetivos se vivió un períodosúper complicado también”, sostuvo.
Y ante la consulta de si esos dos títulos ayudó a liberar tensiones dentro de la UC, dijo lo siguiente. “Sí, creo que sí. En lo personal siento que después de conseguir esos títulos en 2016 nos sacamos un peso de encima que traíamos por muchos años”.
“Posteriormente siento que cada jugador que llegó a la institución se encontró con un club formado que venía de ser bicampeón acostumbrado a pelear títulos y ganarlos.Fue más fácil para la gente que llegó, fue un duro proceso que lo debió vivir la dirigencia completa. Gracias a Dios se consiguió eso y dio para que desde el 2016 en adelante Católica estuviera llena de éxitos”, agregó.
Por último, comentó sobre una chance que espera que se dé en algún momento, la cual es regresar a vestir la camiseta de la UC y allí preparar su retiro del fútbol profesional.
“Poder terminar mi carrera en la institución es un sueño, pero también tengo claro de que debo estar a la altura. Es muy difícil que Católica venga a darte la posibilidad para retirarte”. expresó.
Sin embargo, es consciente que debe andar bien en su actual equipo para activar esa opción. “Para poder tener esa opción debo andar bien futbolísticamente, si no hago las cosas bienes muy complicado. Tengo la ilusión de andar bien, trabajando, luchando para poder lograrlo, estoy con esa mentalidad en Cobreloa. De poder devolverlo al sitial que se merece. Eso puede ser un peldaño más para lograr ese sueño que es retirarme en Católica después”, cerró.
