La Supercopa entre Universidad Católica y Colo Colo se vio empañada cuando, en tierra derecha del primer tiempo, barristas de ambos equipos se trenzaron en un duro enfrentamiento en el sector Andes del Estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción.
El enfrentamiento duró varios minutos, en donde hinchas de ambos clubes se tiraron lo que encontraron, fuegos de artificio e, incluso, la riña siguió afuera del estadio donde un hincha de Universidad Católica fue apuñalado y tuvo que ser llevado a un centro asistencial.
Mediante una declaración pública, Cruzados “hace una enérgica condena a los hechos de violencia acontecidos este domingo 23 de enero, durante la disputa de la Supercopa entre Universidad Católica y Colo Colo, en el Estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción”.
La condena de la UC sigue con “Creemos fundamental incorporar los elementos de seguridad necesarios y disponibles a los estadios del fútbol chileno para que los partidos puedan desarrollarse de buena manera, velando siempre por una eficiente organización que redunde en la seguridad de las familias y de todos quienes asisten a estos espectáculos deportivos”.
Al final del comunicado, no hay espacio a la duda, en donde señalan que “La violencia debe ser erradicada y los hechos de este domingo investigados para dar con los responsables y sancionarlos penalmente para que nunca más vuelvan a entrar a un estadio de fútbol”.
El desorden le puede salir bien caro a la UC y Colo Colo, ya que según información de Al Aire Libre, la ANFP se hará parte de una denuncia de oficio a ambos clubes por los hechos delictivos y podrían tener sanciones de cara al inicio del Campeonato Nacional 2022.