Jeisson Vargas llegó como gran figura a la Universidad de Chile tras un buen paso por Unión La Calera. El Torero se calzó la 10 en el Romántico Viajero, pero su paso por el cuadro universitario no ha sido de los mejores y está a punto de salir del club a préstamo, a pesar que le resta un año más de contrato tras firmar hasta fines de 2023. Ante Huachipato, el volante recibió la gran oportunidad por parte de Sebastián Miranda, pero erró la ocasión y su salida es inminente a fines de temporada.

Vargas en 2020 marcó 9 goles en La Calera y en 2021 alcanzó las 4 conquistas. Sin embargo, el volante creativo se quedó en los laurales con la Universidad de Chile y su aporte ha sido escueto durante 2022. Apenas suma 1.050 minutos, tiene 19 partidos y no tiene conquistas a su haber.

El formado en la Universidad Católica fue pedido expresamente por Santiago Escobar y hace años venía siendo seguido por Azul Azul, que desembolsó una importante cantidad de dinero por el mediocampista. Sin embargo, su contratación fue un somero fracaso, ya que no cumplió las expectativas.

Hace algún tiempo, Jorge Valdivia, en Radio ADN, entregó un diagnóstico de Vargas. Esas palabras, en este minuto, hacen honor a la terrible campaña del Torero en la U. “Es un jugador que no venía teniendo buenos partidos. Yo lo conozco, fui compañero de él en La Calera y es un jugador que no está bien físicamente, que no tiene confianza, futbolísticamente no está bien“, indicó.

Jeisson Vargas -izq-hace rato que no cumple las expectativas en la Universidad de Chile (Agencia Uno)

Vargas está en la lista negra de Azul Azul para fines de temporada. Desde el 27 de agosto que el mediocampista no era titular en la Universidad de Chile y recuperó la estelaridad con Miranda, que confió en él para este partido clave para asegurar la categoría, pero no cumplió.

En los últimos meses, Vargas ha jugado poco y nada. Tras el clásico con la UC, el jugador sumó 8 minutos en septiembre ante Palestino, luego actuó 13’ contra La Serena hace algunas semanas y ayer se matriculó con 56’. Un panorama sombrío para un jugador que tenía cartel de crack, pero por sus malas decisiones y su irregular juego se fue quedando y está a punto de dejar la U.