Luis Hernández tuvo una larga trayectoria en el futbol mexicano. Jugó en Cruz Azul, Querétaro, Rayados, Necaxa, Tigres, América, Veracruz, Chiapas y Lobos B.U.A.P. Y pese a su larga y buena carrera, el ex hombre de la Selección Mexicana jugó tan sólo en dos equipos del exterior: Boca Juniors y Los Angeles Galaxy.

 

En una entrevista que le concedió al medio argentino Súper Mitre Deportivo, el Matador confesó que tuvo la chance de haber jugado en Europa, pero que lo motivó más la idea de vestir la piel del Xeneize.

Maradona y Hernández, juntos en Boca.

Maradona y Hernández, juntos en Boca.

“Yo a Boca llegué por mis propias credenciales; en la Copa Ámerica del '97 en Bolivia, en que México quedó en tercer lugar y yo quedé goleador en el torneo por arriba de Romario, Ronaldo. Fui el mejor jugador de ese torneo por lo que se interesaron tres equipos: El Borussia Monchengladbach, Mónaco y Boca Juniors. Pero definitivamente decidí por Boca que fue y sigue siendo algo maravilloso”, comentó Hernández.

Asimismo, el ex delantero resaltó que si el interés hubiera sido de River Plate, no hubiera aceptado: “Si me llamaba River definitivamente no hubiera ido, hubiera preferido ir a Europa; no tengo nada en contra de River, al contrario es un gran equipo, pero García Aspe tuvo una mala experiencia ahí, entonces no me hubiera gustado lo mismo”.

 

 

En cuanto a su experiencia con el Xeneize, donde en 1997 jugó a préstamo y marcó dos goles en cuatro partidos oficiales, el Matador señaló: Fue una satisfacción jugar en Boca Juniors, aunque sea la Copa Mercosur. Lo de Caniggia fue bonito, fue maravilloso, pero hay algo que no puedes comparar, no lo puedes descifrar es haber jugado con Maradona , en mi debut jugué con él contra Colo Colo, en los entrenamientos nos trataba bárbaro. Lo primero fue jugar en Boca y la recompensa jugar al lado de Maradona”.

Acerca de su buena relación con Diego Maradona, el hombre de 51 años expresó: “Hablábamos mucho con Maradona de México, él lo ama mucho. La espina que tengo clavada es no haber podido ir a su despedida. Yo estaba en el América y al único mexicano que invitó fue a mí. Desafortunadamente, no tuve el permiso de mi equipo porque estábamos en plena competición. Hablé con el entrenador y me dijo que si me iba podían existir consecuencias, pero obviamente uno es profesional y le mandé un mensaje a Diego disculpándome. Me hubiera gustado haber estado en la despedida”.