Para Sebastián Scolari no fue nada placentera la jornada de fútbol que se vivió ayer en Santiago del Estero.

Más allá de que Central Córdoba la pasó mal ante Vélez y terminó perdiendo 2-0 de local por los goles de Ricky Álvarez y Tarragona sobre el final, la mano derecha del DT ya había empezado con el pie izquierdo.

Pasa que antes del pitazo inicial, Mauricio Pellegrino se acercó al banco de suplentes del conjunto local para saludar.

Primero le dio la mano a Alexis Ferrero, técnico interino del club del interior, y luego se dirigió al protagonista previamente mencionado.

En ese momento, cuando se levantaba de su asiento, no vio el techo que tenía encima y se lo llevó puesto con la cabeza.

Al instante, sus colegas se preocuparon por su bienestar, pero él se mostró entero. Seguro va a doler unos días después...