Desde antes de la reanudación de la temporada 2019/20, Maurizio Sarri ya tambaleaba en la cuerda floja de la Juventus. En este año deportivo, la Vecchia Signora no pudo jugar en un gran nivel y, para colmo, el regreso a las canchas estuvo lejos de ser el esperado.

De la mano del entrenador italiano, el equipo de Turín ganó el Scudetto, pero perdió por penales la Copa Italia y hoy ocurrió lo peor que podía pasar: quedó afuera contra Lyon en casa y en octavos de final de la Champions League.

En conferencia de prensa, después del encuentro, Sarri fue contundente cuando respondió sobre su futuro en la Juventus.

"No pienso que los dirigentes decidan por un partido. Estarán en posición de hacer valoraciones más amplias, no sé si a favor o en contra. No espero nada, tengo un contrato y lo respetaré", manifestó.

A comienzos de temporada, cuando reemplazó a Massimiliano Allegri después de ser campeón de la Europa League con Chelsea, Sarri había firmado hasta mediados del 2022.

Él lo dejó claro: si se va de Juventus, será por decisión exclusivamente de los entrenadores.