Debemos viajar a 1989 para entender por qué se hicieron tan fuertes los rumores de ver a Jürgen Klopp poniéndose los botines y saltando a la cancha como jugador.

En dicho año, fue Kenny Dalglish quien, ante Derby County, siendo técnico del Liverpool, entró al campo de juego y sumó algunos minutos para festejar el título conseguido, algo que la federación inglesa permitió.

Claro, los tiempos cambiaron y de ninguna manera la Premier League aprobó que esto se repita con el alemán, buscando agrandar la leyenda.

“No, no hay opción”, afirmó entre risas el entrenador en conferencia de prensa previa al duelo ante Chelsea, último en Anfield por la presente temporada.

Incluso todo indica que nunca hubo un pedido formal, sino que fueron los propios hinchas de los Reds que metieron presión por las redes sociales e instalaron la posibilidad.

Más allá de estareliminados de la Champions y la FA Cup, y con el torneo local definido, el técnico aclaró que no pierden la motivación: “El equipo está centrado al 100% en la competición, yo también. Pero esto no basta con decirlo en rueda de prensa, hay que demostrarlo también en el campo”.