Transitando un partido en el que poco pudo hacer para evitar la derrota del Barcelona en la final de la Supercopa de España, Lionel Messi recibió su primera expulsión como jugador del Barcelona a pocos minutos del cierre del compromiso.

Aplicándole una agresión sin pelota a Asier Villalibre, jugador del Athletic Bilbao, La Pulga, a instancias del VAR, fue expulsado y enviado a las duchas antes de tiempo por parte del árbitro del compromiso correspondiente al certamen local.

En diálogo con sus colegas de El Chiringuito, José Álvarez Haya, exteriorizando algunas novedades del presente el argentino, manifestó: "Me cuentan que lo han visto después del partido y está arrepentido por la acción".

Dejando en claro que a Messi le está pesando la forma en la que reaccionó, el periodista continuó: "Está hundido por la expulsión y por haber perdido el partido, pero fue porque estaba al límite. Había arriesgado una lesión porque quería ganar el título con el Barcelona. Está enfadado, lo mejor es que no tome ningún tipo de decisión hoy".