En medio de una reestructuración en las Selecciones Mexicanas, por culpa de malos resultados, estalló un escándalo que llevó a la suspensión temporal de Maribel Domínguez, entrenadora del Tri-Femenil Sub-20. El 21 de julio, la Federación Mexicana de Futbol emitió un comunicado para informar sobre la investigación en curso.
Tras la polémica, Maribel Domínguez publicó en sus redes sociales un comunicado en el que manifiesta aceptar la investigación, pero no así el daño de su imagen: “Deseo fervientemente que el análisis y posterior dictamen de la institución se ejecuten de manera objetiva, transparente y profesional, por bien del balompié mexicano femenil, al que me duele sea golpeado de esta manera”, indicó la entrenadora.
“Sin embargo, lo que no voy a permitir, bajo ninguna circunstancia, es el daño moral hacia mi persona y mi familia que han ocasionado por presuntos señalamientos que impactan mis valores, integridad, honestidad y transparencia que me han caracterizado en toda mi trayectoria como futbolista profesional y entrenadora de futbol”, manifestó Maribel Domínguez tras ser separada del cargo en la previa al Mundial Sub-20.
La exfutbolista aseguró que irá “hasta las últimas consecuencias” en su derecho a proceder de manera legal, en caso de que se mantengan “las opiniones y aseveraciones tergiversadas, malintencionadas y sin sustento que sólo manchan mi reputación y laceran indeleblemente a mi familia, ya que también este juicio se ha dado en las plataformas sociales sin haber sido escuchada”.
Yon de Luisa se reservó su opinión
El presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Yon de Luisa, prefirió no dar mayor precisión sobre la medida: “El día 18 de julio recibimos una solicitud de investigación y en el momento que nos llegó ese documento, arrancamos con los protocolos ya establecidos en la Federación Mexicana de Futbol. Para un caso de este tipo, la investigación se está llevando a cabo mientras ésta esté en proceso obviamente no podemos comentar mayor tema”, expresó.