La final de la Champions League 2024 entre Borussia Dortmund y Real Madrid comenzó de una manera poco habitual en Wembley. Luego de la tradicional ceremonia y del silbatazo inicial del árbitro Slavko Vincic, tres espontáneos saltaron desde las gradas del mítico estadio e invadieron el campo de juego.
Como ya es costumbre, la transmisión internacional no mostró las imágenes del particular hecho para no alentar a que se sigan cometiendo este tipo de acciones. Sin embargo, de acuerdo a lo narrado en las diferentes emisiones y a las imágenes difundidas posteriormente, se pudo saber que los sujetos buscaron tomarse fotos con los futbolistas Jude Bellingham y Vinicius Jr. antes de ser atrapados por la seguridad.
Todo esto ocurrió ante la atónita mirada tanto de protagonistas como de los aficionados quienes asistieron a Londres para observar el trascendental encuentro.
La historia detrás de la invasión
Lo curioso de esta invasión fue que todos los espontáneos tenían en su playera una inscripción que decía ‘Mellstroy’, que es como se conoce al polémico streamer ruso Andrey Burim, quien prometió darle 300,000 euros a cualquiera que ingresara al campo en la final.
En 2021, Mellstroy fue sentenciado por un tribunal ruso luego de agredir durante una transmisión a Alena Efremova, una amiga suya de 21 años de edad, a quien le provocó heridas en los labios y la boca. Por esto, Burim fue condenado a seis meses de trabajo correctivo y le obligaron a pagar unos 130 mil dólares a Efremova.
Su condena también llegó a internet, ya que debido a esto fue explusado de plataformas como Youtube, Twitch o Facebook. En consecuencia, el ruso migró a nuevos sitios como Kick, donde cuenta con uno de los canales más vistos entre streamers de habla no inglesa.