Hay una teoría circulando en el mundo del boxeo y es que Canelo Álvarez no noquea con gran frecuencia cada vez que se presenta en un cuadrilátero a pelear. Sus estadísticas demuestran todo lo contrario, ya que en 61 victorias que acumula en su carrera, en 39 se bajó el ring antes del campanazo final. Pero aún así sigue generando incertidumbre qué tan fuerte golpea el tapatío y quien dio detalles sobre esta situación fue su último rival, Jaime Munguía.
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El de Tijuana detalló que tanto sufrió la pegada del campeón de los supermedianos en el enfrentamiento que tuvieron en mayo, donde el monarca de la 168 libras retuvo sus coronas por la vía de la decisión, pero habiendo llevado a la lona a su retador. De hecho, un gran rumor asegura que Saúl no quiso finalizar a Munguía por respeto y que, en el tramo final del combate, reguló la intensidad sabiendo que ya era el ganador del enfrentamiento.
“Pues normal. No es una pegada ahora sí que demoledora. La verdad que es fuerte, pega normal, no se me hizo nada del otro mundo. La caída fue porque me agarró, ahora sí, que en la quijada”, empezó diciendo Munguía en plática con Fight Hub. Y además, agregó: “Pero no es como que sentí un golpe así, bastante fuerte. Pero es muy fuerte, muy inteligente y es un gran peleador”.
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De esta manera, se plantea la incógnita sobre lo que sucederá el próximo sábado 14 de septiembre el T-Mobile de Las Vegas, cuando Saúl se enfrente al puertorriqueño Edgar Berlanga en un combate que hará que el mexicano choque contra un retador que acumula 17 nocauts en 22 victorias totales que tiene en su carrera.
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Habrá que ver si Álvarez encuentra el momento para terminar con su oponente antes de tiempo o si decide, contemplando el poder de pegada que tendrá enfrente, optar por una pelea larga en la que domine y estire los momentos con el objetivo final de seguir siendo el monarca en su categoría.
