Dos semanas y media han pasado desde que Las Vegas Raiders comunicó la salida de su entrenador Jon Gruden, a raíz de la filtración de correos electrónicos con escritos en tono racista, homofóbico y misóginos, mientras era comentarista de la National Football League (NFL) en ESPN, para que el dueño del equipo, Mark Davis, rompiera el silencio.
Fue tras una reunión de propietarios de la competición donde el empresario fue consultado por esta situación, y apuntó a que la liga debió haber sabido con antelación la existencia de estos mensajes, que finalmente fueron filtrados por el Wall Street Journal, y que llevaron al Gobierno de Estados Unidos a iniciar una investigación.
"Es una cuestión de tiempo, esa es probablemente la decepción que tuve, el hecho de que lo supieran un par de meses antes y no nos lo informaron hasta, supongo que fue ese jueves (7 de octubre), pero creo que si hubiéramos obtenido la información a principios del verano cuando se enteraron, habría sido mucho más fácil para todos los involucrados", afirmó el dueño de los Raiders.
Dueño de Raiders rompe silencio por salida de Jon Gruden
Cuando se le preguntó a Davis por si había conversado con el otrora entrenador, respondió que "él está dolido, muy dolido. Lo comprendo, pero él comprende las ramificaciones de lo que dijo", añadiendo que "todos tenemos demonios en la vida y debemos entender eso".
En la misma línea, el propietario insistió en que "nunca he visto a Jon exhibir ninguna de esas actitudes en la práctica con el equipo, pero ya no es el entrenador de los Raiders, y es algo que tenía que hacerse, porque no representaba lo que son los Raiders".
