A nivel colectivo, no existe ninguna selección tan superior al resto que la de baloncesto de Estados Unidos. El conjunto norteamericano está mucho más allá que el resto de los países, al punto que en cada competencia quedan fuera de convocatorias jugadores que serían indiscutidos en la mayoría de los equipos. 

Mike Krzyzewski, quien estuvo a cargo como entrenador por diez años entre 2006 y 2016, debió lidear con los egos de jugadores monstruosos, como cuando le tocó tener a LeBron James y Kobe Bryant juntos. Claro, ambos viven de tener el balón en sus manos, pero al Rey no le gustó demasiado algunas tomas de decisiones de su compañero y se lo echó en cara. 

“Kobe empezó a disparar como hacía en los Lakers, lo que no había estado haciendo en todo el juego. Y LeBron me mira y sé que tenemos un problema real. Le dije que me ocuparía de esto. Así que estuvimos despiertos toda la noche como personal tratando de averiguar cómo manejar esto y dije que me dieran sus disparos en una computadora y tendré una reunión individual con Kobe”, comenzó revelando Coach K. 

Kobe Bryant y una lección de humildad 

En diálogo con The Dream Team Tapes, el entrenador contó qué le respondió Bryant: “Estaba realmente preocupado, digámoslo de esta manera acerca de tener esta reunión, pero tengo que hacerlo porque dije que me ocuparía de eso. Así que lo traje y le dije, mira, quiero hablarte sobre la selección de tiros. Echemos un vistazo a estas tomas y dije ‘No puedes hacer eso cuando tienes a Carmelo y LeBron porque erosiona lo que estamos haciendo'. Así que no sé qué voy a conseguir, pero lo que recibo es como un regalo de Dios. Él solo dijo: 'Tienes razón, no haré eso”. 

Todo lo que llegó después en aquellos Juegos Olímpicos de Pekín 2008 fue muy positivo para Estados Unidos, ya que consiguió la medalla dorada sin perder un solo partido. LeBron James y Kobe Bryant se entendieron como pocos y quedó a las claras que lo más importante siempre es el bien colectivo.