Uno de los juegos estelares de la Semana 3 de la NFL lo disputaban Seattle Seahawks contra Dallas Cowboys por el gran duelo de quarterbacks que se vería entre Dak Prescott y Russell Wilson. Sin embargo, las primeras emociones de este juego llegarían por un error insólito de D.K. Metcalf.

Wilson alistó la bazuca del brazo, fijó la mirada en su receptor y con el tiempo precisó para esperar a que le ganará la carrera al esquinero Trevon Diggs, el QB soltó un pase de 62 yardas que llegó a las manos de Metcalf. Con la distancia necesaria de su marcador, el wide receiver estaba a unas pocas yardas de la anotación cuando sucedió lo inesperado.

 

Metcalf se durmió, quiso celebrar o se confió. La verdad no sabemos que hizo, pero puso el ovoide en el brazo derecho y se relajó, en ese momento Diggs le tiró el manotazo e impidió el touchdown. Gran jugada del cornerback de los Cowboys y un blooper inexplicable del receptor de los Seahawks.  

De inmediato las cámaras de la transmisión se quedaron con Metcalf, quien en una actitud de ‘cómeme tierra’ se fue a la banca de los Seahawks con la mirada al piso. El que no estaba nada contento fue Wilson al manifestar su enojo con gestos a los entrenadores. ¿Te imaginas el regaño a D.K. en el vestidor?