Muchos hablan del proyecto, de la nueva camada de jugadores que se viene (que parece ser muy buena), pero hay una motivación más para sumarle a esta lista.
Según RÉCORD, el entrenador que llegue para dirigir a la Selección mexicana, independientemente del nombre, cobrará más de 2.2 millones de dólares anuales y 2.5 luego de firmar el contrato. La cifra más alta en toda su historia.
Además, el diario confirmó que esta movida sirve para darle más peso a la oferta, y seducir aún más a Gerardo Martino, el candidato a quedarse con el puesto.
Nada mal, ¿no?