En La Bombonera, Liga de Quito visitó a Boca con la ilusión de casi una utopía: dar vuelta un 0-3 en contra.

El partido no empezó nada bien para los ecuatorianos: tres amonestados en menos de veinte minutos. No obstante, eso no fue lo peor de todo.

 

A la media hora de juego, Wanchope Ábila aguantó de espaldas, asistió a Carlos Tevez y el Diez le pegó directo al arco para tratar de abrir el marcador.

Sin embargo, en el camino se cruzó Christian Cruz, quien se tiró para desviar el remate al córner. Lo logró, pero el precio fue demasiado caro.

 

Al lateral le quedó su tobillo debajo del cuerpo y al deslizarse lo rompió. Al instante, sus compañeros y rivales se agarraron la cabeza.

Se fue en camilla y entre lágrimas. Durísima imagen.