Los tiempos cambian, los pensamientos también. Para el cuerpo técnico de Boca, comandado por Sebastián Battaglia, aparece una idea muy clara en cuanto al armado del equipo, donde dejó de darle demasiado rodaje a los juveniles, como fueron los casos de Alan Varela, Cristian Medina, Agustín Sandez, Aaron Molinas, Exequiel Zeballos y Luis Vázquez.
Con el arribo de los refuerzos que, en parte solicitó el DT, pero también eran del gusto de Juan Román Riquelme y del Consejo de Fútbol, varios de los pibes que tenían un lugar asegurado entre los titulares del Xeneize, de a poquito se quedaron sin nada. Y con la última decisión que tomó el León, más de un hincha pondrá el grito en el cielo.
A pesar de que en el verano tuvo muchísima participación y se lo imaginaba compartiendo el ataque con Darío Benedetto, la realidad marca que Luis Vázquez quedó muy lejos en los planes de Battaglia. Con el arribo del Pipa, además de que se recuperó Nicolás Orsini, según la información que brindó Diego Monroig en ESPN, en caso de que el ex Olympique de Marsella debiera salir, su reemplazante sería el ex Lanús.
Desde que el atacante santafesino puso un pie en la máxima categoría de Boca, logró disputar un total de 33 partidos, además de que convirtió 8 goles. Y cuando ya se comenzaba a notar que estaba hecho para ser el centrodelantero del equipo, el tiempo, la decisión del DT y la competencia entre sus compañeros, le jugaron una mala pasada. ¿Volverá a tener minutos desde el inicio?
